ÁLVARO RODRÍGUEZ DE GUZMÁN. Segundo de Bachillerato.
Todas nuestras vivencias, por pequeñas que
sean, pueden alterar nuestra percepción de la realidad y, con ello, nuestra
manera de valorarla. De acuerdo con la teoría del caos : "El simple aleteo
de una mariposa puede ocasionar un huracán a miles de kilómetros de
distancia".
Dicho esto, en función del grado de
participación que la persona haya tenido en tal acontecimiento histórico, podrá
percibirlo de una manera más subjetiva u objetiva. Desde mi propia experiencia,
mi punto de vista en cuanto a la pandemia que estamos viviendo de SARS-CoV-2 es
mucho más neutral (cifras, datos...), en
comparación con el ejército que ha estado al frente de esta guerra biológica,
sanitarios que han podido mantener historias afectivas, algo que según los
psicólogos de de la Universidad Complutense de Madrid ha podido afectar en gran
medida a su "psyque". Además, es cierto que cuanto más años pasen del
suceso estudiado, menos detalles recordaremos, centrándonos en los aspectos más
relevantes del mismo. Por otra parte, de acuerdo con un estudio realizado tras
el accidente nuclear de Chernobyl en la zona del este de Ucrania, la gran
mayoría de los encuestados se mostraban indiferentes respecto al suceso, por lo
que podemos decir que un hecho histórico afecta a un individuo dependiendo de
la naturaleza de la persona. De esta manera, podrá mantener una visión neutral
o subjetiva.
Para concluir, cabe destacar que todo con lo
que entramos en contacto nos afecta. No obstante, no ser objetivo a la hora de
analizar un suceso puede acarrear malinterpretaciones de la realidad o
adoctrinamientos . Por este motivo, si queremos ser libres tenemos que aprender
nuestra historia de una manera neutral.